Mesa de comedor

No hay lugar como el hogar… En esta corta frase cabe todo el confort, seguridad, alegría y paz que representa alojarse en un sitio en el que puedes ser tú mismo o tú misma, y disfrutar a tus seres queridos. Es por esto que todos los elementos instalados en casa deben conjugarse para verse bien, y para hacerte sentir bien. 

 

Hablar de decoración de interiores suena sofisticado e incluso, caro, y probablemente lo sea, pues los honorarios de un decorador lo merecen. Sin embargo, te sorprenderías al saber lo fácil que es decorar tu hogar como un experto, tomando en cuenta algunas claves que te ayudarán a armonizar y vestir esas paredes, ventanas y demás espacios. Por supuesto, recuerda que la práctica hace al maestro, así que no tengas miedo de probar, mover, subir y bajar elementos hasta lograr la vista que deseas.

 

  • Defínete: ¿Qué esperas obtener?: Como ocurre con la mayoría de las cosas en la vida, lo primero es tener un objetivo claro para luego trazar el plan que te lleve a obtenerlo. En este caso, define con qué elementos cuentas y cómo esperas que luzca tu casa al finalizar la decoración. Para definir el estilo que mejor se adapte a ti, puedes apoyarte en revistas, páginas de internet y redes sociales. Definir tu estilo te ayudará a construir un espacio digno de llamarse hogar. 

 

  • Elabora un bosquejo: Realizar un simple boceto de cómo quieres decorar tus habitaciones es una gran forma de materializar tus ideas, y de hacer cambios antes de pintar, colgar objetos o modificar las paredes. Si se ve bien en el papel, lo más probable es que también se verá bien en la realidad, además de facilitarte la tarea al saber exactamente qué pasos debes seguir para lograrlo. 

 

  • Empieza por el cielo: Si ya has puesto manos a la obra, empezar por los techos es una excelente forma de darle vida a un espacio. Los techos blancos o de colores suaves permiten que se refleje la luz, haciendo que se perciba dinamismo y claridad en las habitaciones, mientras que los tonos grises combinados con una luz cálida generan comodidad, cercanía y familiaridad. Recuerda que en conjunto, el color y la luz influyen enormemente en los espacios, 

 

  • Crea un flujo adecuado: La selección de los muebles que vas a colocar es de gran importancia, pues estos dictan el flujo y movimiento que tendrán las personas dentro del espacio. Te recomendamos mantener los pasillos libres y evitar más de una pieza grande en la misma habitación. Permite que el espacio luzca y se sienta desahogado, para que sea más agradable permanecer en él. Evita sobrecargar elementos como grandes ventanales, muebles hechos a mano y pisos de madera natural; más bien, procura el equilibrio, colocando sólo uno de ellos en una misma habitación.

 

  • Menos es más; evita el desorden: A la hora de decorar, el desorden es un indeseable enemigo. Nada apaga tanto un espacio como el desorden, pero, esto no solamente significa que debas mantener las sillas bien alineadas, o los pasillos libres. También es necesario deshacerte del exceso de cosas sobre las mesas, sofás y paredes, así que evita colocar demasiadas velas, cuadros y colecciones para mantener al desorden lejos de tu casa. 

 

  • Algunas reglas pueden ayudar: Más allá del estilo personal, que no puede faltar para decorar un espacio tan personal como lo es tu propia casa, existen algunas fórmulas o reglas básicas que los diseñadores y decoradores profesionales utilizan para lograr espacios increíbles. Se trata de seguir algunos patrones, como el equilibrio, el contraste, la repetición, la unidad y la armonía. Aplicarlos a elementos como la textura, colores, tono y tamaños con los que decoras tu hogar te ayudará a obtener mejores resultados. 
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